Es increíble como unas cuantas
sílabas pueden romperte el corazón en tan sólo segundos. Es increíble que esas
mismas palabras arreglen un daño que parecía irreparable. A veces la realidad
nos golpea tan fuerte que todo parece ir de mal en peor.
Esas simples palabras que, ni
siquiera salieron de tu boca, me rompieron el corazón de inmediato. “I’m
addicted to You”. Cuanto me gustaría que estuvieses diciéndomelo a mí, pero sé
que nunca será así porque tú jamás corresponderás a mis sentimientos y jamás me
amarás como yo te he amado en secreto desde hace mucho tiempo.
No tienes idea de lo mucho que
duele derramar lágrimas por alguien que quizá no las merece. No tienes idea de
lo mucho que duele sufrir por alguien que ni siquiera te ama. Duele demasiado
extrañarte cuando no estás conmigo, sabiendo que tú no piensas en mí ni un solo
segundo.
No sé la verdadera razón por
la que te amo. Simplemente es algo que no pude evitar y mucho menos prevenir.
Es tan increíble como en tan poco tiempo te has convertido en una persona tan
importante en mi vida. Fue tan poco lo que tardé en enamorarme de ti.
¿Sabes por qué me enamoré de
ti? Creo que no. Y espero que jamás lo sepas. Cuando te conocí, casi de
repente, me di cuenta de la maravillosa persona que eras. Me demostraste que
podía confiar en ti. Me hiciste sentir tan bien estando a tu lado que no dude
en contarte cosas que jamás le había contado a nadie.
Me di cuenta de que estaba
realmente enamorada de ti cuando dejé de verte por más de dos meses y tu ausencia
se sintió como un puñal en mi corazón. Y permanecí así todo ese tiempo hasta
el, tan esperado, día de tu regreso en mi vida. Ese día sentí como me volvía el
alma al cuerpo cuando te vi.
Supe que en serio estaba
enamorada de ti cuando me abrazaste aquel día. Ese interminable abrazo. Tus
brazos rodeando mi cuerpo, acercándome a ti. Acercándome tanto que sentía tu
ritmo cardíaco y tu aroma. Tu dulce aroma que se ha convertido en una droga
para mí. Una droga tan adictiva que hace que haga hasta lo imposible por
tenerla. Una droga tan adictiva que su ausencia en mi organismo hace que haga
locuras. Escribirte esto, por ejemplo.
Quisiera poder olvidarme de
ti. Tratar de borrar cada una de tus huellas de mi cuerpo. Haría lo que fuera
por no extrañarte de la manera en que te extraño. Quisiera que llegara alguien
a mi vida que me ayudara a olvidarte. Quisiera algún día ser feliz. Porque este
amor es tan imposible que hace que sufra en silencio. Me mata por dentro, como
un cáncer que avanza lentamente. Como si hubiera ingerido alguna clase de
veneno que poco a poco acaba conmigo.
Y la verdad es que soy una
tonta. Porque, al parecer, tu indiferencia hace que me enamore cada vez más de
ti. Soy una tonta por hacerme tantas ilusiones con alguien con quien jamás
estaré. Soy una tonta por enamorarme de alguien tan inalcanzable para mí. Soy
una tonta por amarte en secreto y no tener el valor de decírtelo. Una tonta,
eso es lo que soy.